Creo que quiero un pompero...LO QUIERO, LO QUIERO, LO QUIERO, Y LO QUIERO!
Las pompas son el perfecto ejemplo de metáfora del desastre. Son bonitas, son dulces, son (o parecen) transparentes... pero, si miramos la realidad a través de ellas, nos la presenta deformada y traslúcida, empañada de rayos de luz que dibujan el arco iris de un modo casi inapreciable....y de repente, cuando más concentrada y más crees que te gusta la pompa...explota.
Pof!
Decepción, tristeza, nostalgia, desamparo...
Y todo se acabó.
2 comentarios:
Perfecto
MILGRACIASPORTODO
Hola! Lindo blog (:
Te sigo.me seguis?
Muáák ♥
Publicar un comentario